Av. Brasil 218. Breña. Lima - Perú
  • ARTE E HISTORIA
  • CONTÁCTENOS

La Basílica de María Auxiliadora

  • NUESTRO PÁRROCO
  • LA PARROQUIA
    • LOS SALESIANOS
    • LOS JÓVENES
    • LA COMUNIDAD
    • SERVIMOS
    • CELEBRAMOS
    • EDUCAMOS
  • SANTUARIO
  • DEVOCIÓN
  • OFREZCA UNA MISA
EL PAN DEL ALMASemanario Dominical
viernes, 13 diciembre 2024 / Published in Año 120 N° 6279, Portada

Compartir es la caricia de Dios

Vivimos en un mundo bombardeado por información negativa: hambre, guerras, abusos, indiferencia. Ante esta avalancha de realidades dolorosas, surge una pregunta: “¿Qué podemos hacer?”
Esta pregunta no es nueva. Hace más de dos mil años, hombres y mujeres acudieron a Juan el Bautista con esa misma inquietud. La respuesta del profeta sigue siendo tan actual como radical: “El que tenga dos túnicas, que las reparta con el que no tiene; y el que tenga comida, haga lo mismo”. En otras palabras, compartir es la primera y más concreta expresión del amor.
El amor es el fundamento
El amor es la energía que da vida a la sociedad. Es la fuerza que genera verdad, justicia y dignidad humana. Cuando el amor se ahoga en una sociedad, esta comienza a deshumanizarse, cayendo en la mentira, la explotación y el sufrimiento.
El Papa Francisco nos enseña que compartir no solo beneficia a los demás, sino que transforma nuestras comunidades. En sus palabras: “Cuando compartimos con amor, nuestras manos abiertas pueden ser la caricia de Dios para quien más lo necesita.”
Recuperar el amor en nuestras vidas
Ante estas realidades, la respuesta no puede ser solo indignarnos o lamentarnos. El amor cristiano no se queda en palabras; se traduce en acciones concretas.
El Bautista nos ofrece una solución sencilla pero transformadora: compartir con el que no tiene. No nos pide grandes discursos ni soluciones imposibles, sino un cambio en nuestra forma de vivir: Si tienes más de lo que necesitas, reparte. Si ves hambre, ofrece pan. Si hay soledad, sé compañía.
Jesús mismo nos mostró este camino. No hizo milagros para impresionar, sino para sanar y liberar. No se limitó a señalar el pecado, sino que dio su vida para salvarnos. Así también nosotros, cada pequeño gesto de amor puede ser una chispa de vida en un mundo oscuro.

Comparte esto:

  • Haz clic para compartir en Facebook (Se abre en una ventana nueva) Facebook
  • Haz clic para compartir en X (Se abre en una ventana nueva) X

Me gusta esto:

Me gusta Cargando...

Relacionado

Tagged under: Portada

Deja una respuesta Cancelar la respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Noticias Eclesiales

“El chico de Milán”: la historia de Carlos Acutis
Pastoral de Salud: podcasts sobre el manejo de las emociones
Siervo de Dios: P. Luis Bolla
Don Bosco y el Sagrado Corazón de Jesús
Intención de oración del Papa para el mes de junio

Para reflexionar

En tren, Don Bosco recorre toda América del Sur
El segundo milagro de Pier Giorgio
Cómo crecer en la compasión
La cima de Pier Giorgio Frasatti
Los diez jóvenes de Don Bosco

Noticias Vaticano

  • Las palabras del Papa en la oración del Ángelus
  • Santa Misa en la Parroquia Pontificia de San Tomás de Villanueva en Castel Gandolfo,

LA BASÍLICA

  • NUESTRO PÁRROCO
  • SERVIMOS EN LA PARROQUIA
  • PARROQUIA QUE EVANGELIZA
  • UNA PARROQUIA QUE CELEBRA
  • EDUCAMOS EVANGELIZANDO
  • SANTUARIO MARIANO
  • DEVOCIÓN A MARÍA AUXILIADORA

EN EL PERÚ

  • SALESIANOS PERÚ
  • BOLETÍN SALESIANO
  • PADRE LUIS BOLLA
  • COLECCIÓN PADRE BOLLA
  • FUNDACIÓN DON BOSCO
  • ARCHIVO HISTÓRICO
  • BICENTENARIO SUEÑO.9

EN EL MUNDO

  • S.D.B.
  • INFO ANS
  • SALESIANOS ROMA
  • FAMIGLIA SALESIANA
  • SALESIANOS ESPAÑA
  • BOLETÍN SDB ESPAÑA
  • CIUDAD DEL VATICANO

Desarrollado por el Centro Salesiano de Comunicación

TOP
%d