Ante todo, el “retiro mensual”, era un medio para mantener al alumno vigilante en su vida cristiana; pero en el caso de Valdocco, se hacía énfasis en el hecho trascendental y realista de tener que morir, y con la característica de ser ordinariamente imprevisible el día y la hora.
Así lo proponía el escrito “Joven Instruido”(Don Bosco 1847), a los muchachos: “tiene como objeto el de disponer un día al mes todas nuestras cosas, espirituales y temporales, como si aquel día fuésemos de verdad a morir”.
El Ejercicio de la Buena Muerte creaba un ambiente de profunda paz e invitaba a reflexionar sobre el destino supremo del ser humano, la incertidumbre de la vida, los riesgos del pecado y la importancia de los Ejercicios Espirituales.
https://www.boletinsalesiano.info/conociendo-a-don-bosco/12182-cuando-don-bosco-ensenaba-a-morir-bien-para-vivir-mejor

